lunes, junio 13, 2005

Va ser que no

A veces la vida puede ser muy cruel. Que se lo pregunten, por ejemplo, a los aficionados del Celta. Dos semanas después de haber celebrado por todo lo alto su regreso a primera división, una cagada producto de una reglamentación de mierda les puede dejar sin ascenso.
También les podríamos preguntar qué opinan a las 30.000 gargantas que se desplazaron a Madrid para animar a Osasuna. 60.000 ojos que esperaban ver como su equipo ganaba el primer título de su historia y que acabaron enjuagados en lágrimas.
Por lo visto San Fermin es más de toros que de fútbol.

¿Puede existir algo más cruel?.
Pues va ser que no.